Plantas medicinales: romero
Quien más quien menos, conoce el "romero", y sabe que alguna que otra propiedad medicinal tendrá, a más de percibir su rico aroma.
Y sí, efectivamente el "romero", aunque no es una hierba medicinal sino más bien un arbusto leñoso de color verde que puede llegar a medir hasta 1,5 metros de altura. Sus flores aparecen en primavera y otoño, aunque en zonas templadas pueden verse durante todo el año, en diciembre y son de color azul claro o violeta pálido, pero también hay ejemplares con flores blancas.
El romero, (Rosmarinus officinalis), es una planta muy aromática, con un fuerte olor alcanforado, de la familia de las labiadas, de hoja perenne.
Aunque sea un arbusto y parezca que crece muy grande, en realidad se lo puede mantener en una maceta como ser observa en esta imagen.
Podríamos proponer como un regalo de navidad distinguido una plantita de romero.
Propiedades:
- Alto potencial curativo.
- Es recomendado para la insuficiencia hepática.
- Efectivo para la acidez estomacal.
- Combate la anemia pues cuenta con hierro.
- Ayuda en casos de flatulencias o meteorismo.
- Es útil para aliviar los dolores menstruales.
- Es diurético y auntioxidante.
- Alivia y combate las enfermedades respiratorias.
- Regula la glucosa en la sangre.
- Combate el mal aliento. Es antiséptico y estimulante.
- A través del uso externo podría cuidarse el cutis y el cuero cabelludo.
Modo de uso
- Se puede tomar en infusiones.
- También en el tereré y en el mate.
- Puede utilizarse en forma de aceite esencial.
- Como enjuague bucal.
AROMAS
Prácticamente es la reina de las plantas aromáticas. Su color verde la caracteriza pero aún más su aroma a incienso, su fragancia recuerda a cálidos fogones y platos suculentos.
Condimento ideal es para platos fuertes y grasos –especialmente carnes y aves asadas; su grato perfume desodoriza cualquier ambiente.
El romero es una planta rica en aceite esencial responsable de las características aromáticas de este planta constituido esencialmente de pinene, limoneno, alcanfor, ácido rosmarínico, ácidos fenólicos, taninos, resinas, flavonoides y otros.
Contraindicaciones
No conviene a personas con gastritis agudas, úlcera gastroduodenal, hepatopatías, epilepsia y Parkinson. Se debe evitar durante el embarazo y la lactancia.
Los baños calientes con romero deben evitarse en pacientes con: heridas abiertas, grandes lesiones en la piel, fiebre, inflamación aguda, trastornos circulatorios severos, hipertensión.
En dosis altas o con uso continuado el romero es tóxico.
La esencia puede producir irritación renal y rubefacción dérmica.
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